DUDAS ENTRE RASPINES, LIMAS Y PAPEL DE LIJAR
Cuento para tallistas.
En mi pequeño rincón de talla, las herramientas cobran vida al llegar la hora mágica y se dedican a conversar. La otra noche tenían una charla tripartita entre los raspines, las limas y el papel de lija, sobre cuál de ellos era mejor para el acabado de las piezas que se tallaban.
Los raspines decían, nosotros somos como las limas para madera pero pequeñitas, tenemos diferentes formas y vamos muy bien para llegar a todos los rincones de las tallas, lo decían muy orgullosas de sí mismas.
Las limas les respondieron, no menos orgullosas, pues a nosotras nos usa mucho ponent, aunque no tengamos tantas formas como vosotras y seamos casi todas planas pero todas, todas somos muy rectas, no como vosotras que sois unas casquivanas y tenéis el grano gordo como vuestras hermanas mayores las limas para madera, desbastáis mucho, vais bien para rebajar, pero a la hora de afinar la superficie de la talla no os utiliza, porque sois unas glotonas y dejáis muchas marcas de rallado y un mal acabado, por eso nos usa más a nosotras, chincharos.
El papel de lija agrupado en diferentes rollos y de diferentes numeraciones de la más gruesa a la más fina, les respondió, pues nosotros, nosotros, aunque somos más humildes por no ser tan duraderos como vosotras, que sois una frías y estiradas tanto, que parecéis de hierro, nosotras somos muy apreciadas por ponent, le salimos más baratas que vosotras aunque duremos menos, nos corta a la medida que necesita para lijar las tallas, nos adapta a otros objetos para llegar a todas las partes de la talla, y además no tenemos el tipo de grano fijo como vosotras, chinchaos, él nos tiene en gran estima porque tenemos gran variedad de números de grosor y vosotras no.
El viejo cuchillo de talla, que tantas y tantas horas había pasado en la mano de ponent, sintiendo su calor, sudor, y firme agarre mientras tallaba, les contesto:
Queridas compañeras, como sabéis llevo muchos más años con ponent que vosotras y a base de hacerme tallar y tallar, cuidarme afilándome y puliéndome con cariño, creo entender un poco su método de trabajo al tallar, pensad que cuando os tiene que utilizar a vosotras, a mí me deja al lado, cerca de él, y yo observo cómo y para que os usa, por lo tanto no discutáis en cosas banales, TODAS SOIS ÚTILES, cada una para lo suyo, la talla final no puede producirse sin vuestra participación en un momento de la talla u otro, primero, si hace falta, él utilizará los raspines después las limas, y finalmente el papel de lija, todos los útiles de talla somos necesarios pero no imprescindibles, pues ya habéis visto en más de una ocasión, que ponent si no nos tiene en ese momento, nos sustituye con imaginación con otros útiles y a veces hasta se los fabrica él mismo, y para acabar ya que se nos está haciendo de día y tendremos que estar calladitos, deciros que lo más importante no somos ninguno o ninguna de sus herramientas de talla, ni siquiera él mismo que es quien nos utiliza, ni la madera, ni nada. Lo más importante, imprescindible y necesario, es el amor por la talla y más que este aun lo es la fuerza de voluntad y la decisión de tallar y seguir tallando. Chisssssssssss que sale el sol.