La Belle Allemande de George Erhart
La pasión por la talla es mi debilidad .No puedo disimularlo. Pido disculpas de antemano.
Quiero dar gracias a mi amigo Paco por ayudarme a algo más que traducir correctamente mis palabras.
Como ratón de biblioteca puedo asegurar que los libros una vez leídos hay que cerrarlos, olvidar las opiniones y destilar el dulce licor de su enseñanza.
Quiero proponer un ejercicio de atención, de búsqueda de detalles.
Los sentidos dialogan directamente con la imaginación. Miraremos juntos la figura que acompaña este relato con la curiosidad de un niño y la sabiduría de un anciano. Es célebre la frase del malagueño Pablo Ruiz Picasso:
"Desde niño pintaba como Rafael, pero me llevó toda una vida aprender a dibujar como un niño"
Vamos a observarla como lo que es, no como lo que dicen que es.
Por favor permítanme que por una vez les lleve de la mano. Es un gran honor par mí que me acompañen.
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Su rostro aunque joven muestra serenidad, seguridad, sabiduría, no le preocupa en absoluto la desnudez. Su mirada se escapa hacia abajo como evocando recuerdos con una mezcla de nostalgia y dulzura. Permanece seria, ausente. Si ocultamos sus ojos, la boca parece esbozar una imperceptible sonrisa que la innata capacidad humana de leer pequeñísimos detalles en los rostros convierte, en algunos momentos, en inicio de llanto. Hagan la prueba.
La cabeza ladeada y hacia atrás parece recibir el sol de la mañana. La frente despejada sugiere la claridad de sus pensamientos, y una cascada de cabellos nos dirige la mirada al hombro.
Llama la atención la postura de las manos. En posición orante son pequeñas de uñas cortas y cuidadas.
Las manos no se entrelazan con firmeza, muy al contrario, apenas si se rozan. Si intentamos reproducir la postura veremos cómo la mano izquierda relajada sigue la posición del antebrazo y es abrazada por la mano derecha que doblada se apoya sobre ella como si la primera se hubiera deslizado suavemente desde atrás, abriéndola ligeramente.
No se aprecian las clavículas ni los tendones y músculos del cuello, sólo muy ligeramente la fosa yugular.
No es un cuerpo delgado ni sometido a desgaste físico. La juventud se destaca en los senos pequeños y firmes. El izquierdo descubierto. El derecho realzado por los cabellos que se enredan en el pezón.
La pierna izquierda aguanta el peso del cuerpo, la derecha se levanta para, perezosa, iniciar un paso. La rodilla derecha se adelanta. El torso girado hacia la derecha alinea la rodilla con el hombro izquierdo. El rostro sigue el gesto de la pierna derecha y se ladea hacia la izquierda y hacia abajo. El giro de la cadera, hombros pierna y cabeza dan equilibrio, naturalismo y sensación de peso al cuerpo. Las articulaciones de la rodilla y los músculos de la base del muslo y de las pantorrillas son más marcados que las de brazos y cuello. Eso aumenta la sensación de peso. La larga cabellera rubia que parece una dorada y pesada capa caída sobre la espalda. Hay una niña debajo. La espalda es tan importante como el frontal. La talla ha sido ideada para verla alrededor. Los pequeños pies son realistas. Abiertos en V soportan el peso de un cuerpo que se adivina ligero, casi infantil, pero acostumbrado a la dureza del caminar por un desierto de piedras. Las pantorrillas elevadas son típicamente femeninas. Las caderas amplias, tan anchas como los hombros y el vientre engrosado muestran un estereotipo de mujer diferente al estilizado canon moderno.
A pesar de sólo poder ver fotografías…¿Creen que hemos llegado a conclusiones parecidas a las de los técnicos del Louvre? Lean y comprueben..
“La lánguida pose y la expresión meditativa quieren transmitir el éxtasis místico del penitente, mientras que su maravillosa belleza y su brillante cabellera dorada pretende evocar su esplendor sagrado. La concepción de este desnudo femenino está en consonancia con el contenido espiritual de la imagen religiosa idealizada de la tradición medieval.
Acostumbramos a embriagarnos con datos que condicionan nuestra propia opinión.
Por ejemplo sabemos que se la conoce como La bella alemana. En realidad como “La Belle Allemande” . La estatua de madera antiguamente en la Colección Siegfried Lammle de Munich fue puesta a la venta en el mercado de Arte alemán a finales del siglo XIX y fue comprada por el Museo del Louvre de París, en 1902 donde se encuentra..
Fue diseñada conscientemente para ser vista en redondo, ya que los cabellos de la espalda están tan cuidadosamente tallados y coloreados, como los de la parte delantera.
En algún momento la estatua fue descendida y se eliminaron los ángeles. Se restauró en el siglo XIX y se le colocó el actual pedestal. En la fotografía podemos ver una versión de María de Magdala de Tilman Riemenschneider de 1492 para un Altar, 23 años anterior a la talla de George Erhart
¿Necesitamos realmente tanta información? ¿Si? , ¿No? Cada uno es libre de juzgarlo.
Quiero acabar con una imagen española de 1664. Fue ideada y tallada por el granadino Pedro de Mena 149 años después. Corresponde al periodo barroco. Es magnífica, profundamente psicológica y de un gran virtuosismo. Les invito a hacer el mismo ejercicio. Les pido que valoren el arte español. Es sin duda uno de los más ricos de Europa.
Sinceramente agradecido por la oportunidad.
Mark