En 1946 Frederic Marès (1893-1991) cedió a Barcelona más de 3000 obras policromadas de los siglos XI a XIX.
Este escultor noucentista autor de conocidas obras civiles tuvo el éxito suficiente para adquirir, a lo largo de toda su vida, tallas en iglesias y conventos de todo el país, especialmente de Castilla, pero también en salas de subastas parisinas.
Era un momento en el que tras la guerra la necesidad vaciaba de obras de arte las Iglesias y se vendían a coleccionistas las pocas piezas supervivientes.
Marès fué durante muchos años profesor y Director de la Escuela de diseño de la LLotja de Barcelona.
En el siguiente video realizamos un recorrido por las salas de este singular museo, ahora remodelado.