Los programas de dibujo y edición fotográfica por ordenador han permitido encontrar más mecanismos por los que el cerebro puede obtener información visual, nada obvia, y convertir una imagen plana indescifrable en un objeto tridimensional.
Un tiburón en relieve.
Mirar fijamente unos segundos al centro de la imagen intentando diverger un poco la vista, como si fuerais a enfocar un objeto que estuviera por delante de la pantalla y aparecerá la imagen en relieve de un escualo hecho con puntos de colores que se separa del fondo y parece salirse de la pantalla.Cuanto más se entrena más fácil es descubrir la imagen 3D oculta tras un diseño de puntos absolutamente inconexos.
¿Se trata de magia?, ¿de la sofisticada aplicación de complejísimas ecuaciones que requieren supercomputadoras?, ¿es una nueva forma de expresión artística?